Mi primer oro en triatlón

El pasado 29 de Marzo se realizó en Calima- Darién, el circuito Nacional de Triatlón y el campeonato Nacional Junior, donde participaron cerca de 300 triatletas de diferentes ciudades del país. A pesar de lluvias, errores de logística y un terreno difícil; los atletas desafiaron rivales, obstáculos de la naturaleza y sus propios límites. La crónica es la siguiente:

....Hermoso panorama!

Sábado (Día 1): Primera prueba de resistencia, el día previo a la competencia.

Llegamos a recoger nuestro kit y confirmar nuestro registro al lugar acordado por la Federación Colombiana de Triatlón; indispensable para saber nuestro número de competencia. Además para atender la charla respectiva donde nos facilitarían los horarios, las distancias, los recorridos y las normas establecidas de la competencia.

Desafortunadamente nos encontramos con un desorden monumental y por lo que le escuché a mis compañeros pareciera que fuera una constante de nuestra Federación. Lo cual no debería ser así, pues se supone que es un organismo del orden privado, que rige desde 1987 los destinos de uno de los deportes más exigentes en el mundo, de las actividades olímpicas, encargado de masificar en todos los niveles el triatlón. Y de esta manera promueve la práctica de éste deporte, en los colegios, universidades y clubes multideportivos del país. ¿Qué sucede entonces?

Pagamos por un buen servicio pero al final vemos que se quedan cortos, por la pobre gestión y mala logística que prestan a los deportista, quienes al final ruegan porque cambien dichas "reglas de juego", antes de que sea muy tarde. Duele esta situación, cuando hay tanto por hacer y tanto por demostrar.

Afortunadamente no todo es malo, pero si faltan muchas cosas por mejorar porque el deporte no puede tomarse a la ligera, sino todo lo contrario, debe ser una disciplina y una industria que poco a poco va a ir creciendo y formando atletas, que seguro nos darán muchas alegrías, durante el proceso de lograr que el triatlón se convierta, en uno de los 3 deportes más practicados en Colombia. Pero para eso las cosas se deben hacer correctamente.

Domingo (Día 2): Segunda prueba de resistencia el día de la competencia; La Lluvia.

Me levantó el olor de la lluvia, el sonido de las gotas sobre el techo y las ganas de un día inolvidable. Se suponía que la competencia empezaba a las 8:00 a.m para los más pequeños y para los de grupos por edades- distancia Sprint y distancia olímpica- empezaba a las 10:20 a.m. Pero debido a la lluvia todo de retrasó. Sin embargo no era momento de abandonar, entonces apenas nos levantamos nos pusimos nuestro traje "armadura" de Ironman y salimos por lo nuestro a dar lo mejor hasta el final y a dejar el nombre de nuestro club por todo lo alto.   

"Lluvia cae lentamente sobre mí"

Previa de la competencia:

Cuando llegamos a las 9:30 a.m, ya la lluvia había terminado, pero aún el viento golpeaba sin misericordia. La competencia seguían su curso y el público alentaba a sus respectivos gladiadores.

A minutos de empezar nuestra competencia; tuvimos la charla respectiva con nuestro coach Gustavo, dándonos los últimos consejos de un terreno complicado por naturaleza y por el viento de esa mañana, que azotaba al municipio de Calima.

Tricali-Team

Antes de que la hora cero llegara todos fuimos al lago a calentar un poco. Se sentía un oleaje fuerte, dispuesto a probar nuestra valentía y coraje y ese era nuestro verdadero desafío. Los primeros segundos eran helados, pero al minuto ya los músculos se adaptaban a una temperatura soportable para la competencia.

Pelotón!

¡Hora cero!: Natación

Dieron el momento de largada y cada uno tomó su rumbo; unos realizábamos la modalidad Sprint (750m/20k/5k) y otros realizaban la modalidad Olímpica (1500m/40k/10k).

Coraje significa, tener miedo de hacer algo, pero aún así hacerlo.

Apenas empecé mi ruta hacia la primera boya, todos mis pensamientos mecánicos y técnicos aprendidos en mis clases de natación se quedaron guardados por un momento -pienso que era normal, siendo la primera vez en aguas abiertas, donde el instinto de supervivencia es mayor que cualquier otra cosa-. Por otro lado, la parte creativa de mi cerebro imaginaba una película, con matices reales y de ficción tratando de equilibrar la mente y de liberarla de miedos, temores y diferentes angustias, debido a aguas oscuras, frías y vientos poco amigables.

Entregarlo todo y no guardarse nada.

Durante mi recorrido pude percibir 3 situaciones diferentes: 1. Los triatletas que pedían ayuda a los rescatistas y automáticamente eran descalificados. 2. Los triatletas que en vez de acercarse se alejaban de la boya, en medio de un futuro incierto. 3. Los que avanzábamos, luchábamos y sobrevivíamos con la meta siempre fija. Mientras tanto, yo seguía mirando mi punto de referencia cada tres brazadas, tragando agua por montones (sobre-hidratándome), pero con el rumbo fijo.

Si no fue hoy, será otro día.

Afortunadamente nunca me entró el desespero, mantuve la calma, mantuve mi ritmo, viví mi película, adelanté a unos pocos y en la parte más difícil que era el tramo en contra de la corriente (los últimos 200 m) le di muy duro hasta la bolla inicial y ya en tierra firme me sentí más fuerte, más hidratada y con más energía para continuar la primera transición. Demoré un poco más de la cuenta en ésta, mientras me ponía los zapatos y el casco. Mi tiempo en aguas abiertas fue: 0:20:25 .

Correr con la mente y el corazón.

Para los que no saben, las transiciones son los tramos entre cada disciplina (natación- bici / bici- trote.). Su importancia radica en que cada transición, puede definir tu competencia, dependiendo de tu agilidad y habilidad para realizarla de una manera exitosa. Cada persona tiene ya su metodología establecida, para que al momento de la competencia todo salga de la mejor forma. Pero hay que trabajarla varias veces, previo a cada competencia ya que un segundo de más; es mortal para ese segundo que tanto esfuerzo costó bajar, en el trayecto anterior.

Primera Transición.

Ciclismo:

Los siguientes 20 kilómetros (dos circuitos) rotando parecían sencillos, pero fueron los más duros para mí por las constantes pendientes y las bajadas, que había que hacer con precaución debido al piso húmedo. Además estuve sola todo el tiempo cortando el viento y pisando algunos huecos disfrazados de pequeños charcos, que muchas veces hicieron que presintiera una pinchada y por ende el final de mi competencia.

La voluntad, es poner las ganas es acción.

Yo creo que la parte de la bicicleta es la más tenebrosa, porque uno debe trabajar en equipo con su máquina. Uno siempre depende de la bici, de las circunstancia de la carrera o simplemente de un buen o mal día (clima, imprudencia de otro, etc) y al mínimo descuido, todo se puede terminar. De allí que, veía personas pinchadas y otras despinchándose, muy frustrante la verdad, no poder tener el control sobre eso. Pese a esto, traté de limpiar mi mente de pensamientos negativos y continué mi recorrido. 

Dale pedal!

En las bajadas tuve precaución y tuve en cuenta las recomendaciones del profe, que nos pedía prudencia con nuestra vida, ya que la carretera tenía algunos desperfectos. En mi segundo circuito, empecé a sentir el cansancio y ya estaba ansiosa por correr. Cuando terminé mi recorrido bajé a la carrera por el tapete, con la bici de mi mano, para la siguiente y última transición. En este tramo me demoré 0;44:05. 
Enseguida me puse mis tenis y salí despavorida a la carretera.

Más Pedal!!!

Running:

Eran solo 5 k pero debían ser intensos, así que apliqué mi paso demoledor y sin darme cuenta fui cazando a compañeros y contrincantes. Por otro lado, compañeros que todavía seguían en el circuito de la bicicleta me apoyaban y daban aliento, al igual que otros que encontraba en la calle trotando y de igual forma les devolvía la señal de ánimo. Bastaba una mirada, una sonrisa, o una mano alzada para sentir esa buena energía. -Eso realmente ayuda y es reconfortante durante ese momento-.

Finalmente miro que me falta un kilómetro, mi corazón se agita un poco más y decido con esa adrenalina impulsada por el corazón, dar mi último aliento, logrando al final del recorrido de trote un tiempo de 0:26:18. Cruzo la meta con un tiempo total de 1:30:48. 
Para finalizar, recibo con alegría mi mejor tiempo en la categoría y mi primer oro en esta locura de deporte.

¡Champion!

Moraleja:

Una de las cosas que me ha enseñado el triatlón durante este año, es que uno en la vida, debe hacer los cambios (transiciones) de una manera ágil, inteligente...eficaz, de tal forma que te permitan adaptarte a cualquier situación y en este caso a cualquier terreno. Porque así es la vida, llena de sube y baja, llena de imprevistos y obstáculos en el camino y solo depende de nosotros tomar decisiones en el momento preciso y adaptarnos al cambio, puesto que solo así llegaremos victoriosos a nuestro destino.

También con esta nueva experiencia aprendo que; aparentemente es una competencia individual, pero en realidad nadie se imagina todo el equipo de trabajo que hay detrás. "Solos no somos nada y en equipo podemos lograr grandes cosas. Por eso el triunfo es de todos."

Otra de las enseñanzas es que si quiero ganar oro, debo entrenar las tres disciplinas por igual y con la misma intensidad, para no depender de otros factores. Porque el verdadero campeón: ¡Es bueno en todo!

Quiero seguir ganando medallas de oro, pero sobre todo quiero seguir ganándome a mi misma; mejorando mis tiempos, rompiendo mis límites -nuevas emociones- y disfrutando del proceso, junto a mis compañeros. Porque aunque esto es muy duro y se sufre con ganas, vale la pena y seguirá valiendo la pena.

In my way to be an IRONMAN!

Y para ti ....¿Cuál es o cuál sería la sensación de ganar una medalla de oro?

Escribiendo desde mi castillo encantado, Soficienta.

....La familia Tricali!